12 mayo, 2012

LOS DESVÍOS DE LAS PRINCESAS

Hoy comprendí por qué ‘Princesas’ no es una de mis películas favoritas sino la que más. En medio de unos de esos momentos conmigo misma me di cuenta de que compartía la misma filosofía de vida que Caye. Quizá su texto más famoso se quedó guardado en mi memoria para brotar en un día como hoy.

No me había dado cuenta hasta hoy de que la vida, tú vida, nuestra vida es como una autopista en la que a veces pisas el pedal del acelerador completamente sin importante la señal que indica el máximo de velocidad porque quieres llegar lo antes posible a ese destino, a esa cita, a esa película o al siguiente verano. Y, otras veces, ralentizas cada paso para alargar la distancia existente ante ese examen final o ese adiós.

La verdad es que nos pasamos la vida corriendo de un lado para otro, siempre con prisas, con un destino siempre fijo y pensando qué decir y cómo hacerlo cuando lleguemos allí. Solamente los semáforos en rojo y los atascos nos prestan unos minutos para no pensar porque en cuanto la luz verde se encienda, volveremos a pisar el pedal del acelerador como si esa fuese la fórmula para hacer llegar antes ese verano en la playa. Pero lo que no sabemos, es que son esos desvíos desconocidos los que harán caer nuestros planes. Ese desvío que tomas solo para saber a dónde te lleva será el que te enseñe por sorpresa aquello que estabas buscando en la dirección equivocada. Porque a quién no le ha pasado que ha encontrado algo cuando ha dejado de buscarlo solo porque lo estaba haciendo en el lugar equivocado…  

No hay comentarios:

Publicar un comentario